lunes, 25 de abril de 2016

Recomendaciones teórico-metodológicas para Educar en la Creatividad


Educar en la creatividad implica partir de la idea de que ésta no se enseña de manera directa, sino que se propicia y que para esto es necesario tomar en cuenta las siguientes sugerencias:

ü  Aprender a tolerar la ambigüedad e incertidumbre. El maestro pudiera favorecer en los estudiantes el desarrollar una tolerancia a la ambigüedad, dándoles más espacio en sus clases para pensar sobre una situación problemática que se les presenta y estimulándolos a reflexionar desde el principio de la clase. También logrando que formen parte de las reglas del grupo, un periodo de misterio ante los trabajos y conocimientos que deben edificar.

La escuela necesita la incertidumbre para que el alumno se lance a explorar el conocimiento que no logró construir totalmente en el salón de clases o fuera de éste.

ü  Favorecer la voluntad para superar obstáculos y perseverar. Cuando empezamos con un proyecto innovador para la educación, debemos partir siempre de dos metas: la primera, ser fieles a los objetivos que deseamos alcanzar; y la segunda, estar conscientes de que para llegar a lograrla se van a presentar toda una serie de barreras a derribar. Se elimina una y aparece otra y así sucesivamente hasta alcanzar nuestro objetivo. Los obstáculos se convierten en oportunidades y no en amenazas.

ü  Desarrollar la confianza en sí mismo y en sus convicciones. En la escuela se debe cultivar la confianza en sí mismo a través de indicadores que no siempre sean las buenas notas y el pasar de grado. Otros indicadores que se debieran tomar pueden ser: la apertura mental, la originalidad, asumir riesgos y plantearse preguntas que en determinados momentos pongan en duda el conocimiento que se está trabajando, entre otros.

ü  Propiciar una cultura de trabajo para el desarrollo de un pensamiento creativo y reflexivo. El maestro que desea lograr un clima donde los alumnos aprendan a pensar y crear mejor debe trabajar duro. A veces los resultados alcanzados no son los esperados o no son tan gratificantes en un periodo corto de tiempo, pero hay que seguirle poniendo todo el empeño, ya que las huellas formadoras que se dejan en los alumnos trascienden el presente y se recogen en el futuro.

ü  Invitar al alumno a transcender el presente con un proyecto futuro. El maestro creativo constantemente se anticipa a cómo va a ser la clase siguiente. Todavía no ha finalizado la clase y él ya está viendo qué recursos pedagógicos va a emplear para que la siguiente sea de mejor calidad. Además se acompaña de una forma optimista de ver la vida. Esta anticipación se relaciona mucho con el disfrute por el proceso de enseñar más que por los resultados que pueda obtener. También él invita a sus alumnos a creer que toda idea soñada puede ser una idea posible.

ü  Aprender a confiar en lo potencial y no sólo en lo real. El profesor debe confiar en las capacidades potenciales de sus alumnos y no solamente en las reales. Debe favorecer una enseñanza desarrolladora y colaborativa en donde lo que el alumno puede realizar con su apoyo pueda hacerlo solo el día de mañana.

ü  Vencer el temor al ridículo y a cometer errores. Debemos enseñar a nuestros alumnos a vencer el temor al ridículo y a cometer errores, ya que esto representa romper con reglas establecidas. En el caso del temor a cometer errores es importante aprender a reciclar los mismos como fuente de aprendizaje. Además, evitar que el alumno tenga miedo a equivocarse ante el maestro por razones como las siguientes: perder su cariño, romper con la imagen de buen estudiante, contradecir el método de aprendizaje que sigue el educador.

ü  La autoridad para validar el conocimiento debe partir de un proceso social, dialógico y cooperativo. Para esto es necesario romper con aquellas creencias en las cuales el maestro tiene la verdad acerca del conocimiento a construir y el alumno debe encontrarla bajo el control de este experto; donde el maestro constantemente habla y el alumno escucha y les hace sentir en las clases que está plenamente seguro de lo que enseña, que hay poco que descubrir e indagar en relación con esto. Este tipo de maestro genera actitudes en los alumnos ante el aprendizaje que se caracterizan por la inseguridad, la pasividad, la sumisión, la dependencia, la repetitividad, la reproducción de conocimientos más que la construcción activa del mismo.

ü  Las necesidades fundamentales del alumno están relacionadas con enseñarle a pensar creativa y reflexivamente, o sea, a pensar de manera excelente. Lo que se requiere es un alumno imaginativo y cuestionador de las verdades que aparecen a través de la voz del maestro o de los libros de textos y un constructor de puentes imaginarios para que transiten las ideas invisibles para la mayoría y en un momento determinado se hagan visibles; que analice las experiencias y conocimientos de la realidad y los sistematice a través de su pensamiento crítico y creativo, con la cooperación de un educador con profundos conocimientos de grupo y de mediación.

ü  Es más valioso cubrir una pequeña proporción de conocimientos a fondo que una gran cantidad. Es más útil que el alumno obtenga un pequeño terreno del conocimiento que una gran cantidad pero de manera superficial, y que discuta el significado de los mismos y descubra los sentidos que pueden tener de acuerdo a su historia y cultura.

ü  Convertir las aulas en espacios para asombrarnos, experimentar e investigar. Uno de los recursos más importantes y al alcance del educador es la capacidad de asombrarse ante cada comentario reflexivo o creativo de sus alumnos. Para lograr lo anterior él propicia un conocimiento lleno de sorpresas y situaciones inesperadas. Es decir, lleva a los alumnos a disfrutar de lo inesperado y lo incorpora dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje que está ocurriendo.

ü  Construcción de las habilidades de pensamiento creativo y crítico a trabajar en dos planos. Se parte de que todo lo aprendido y por aprender por el alumno se le va a presentar siempre en dos planos: uno fuera de él y el otro dentro de él .Durante la clase, el lenguaje de los otros —en cuanto al desarrollo de la habilidad a trabajar— va a ir formando parte del lenguaje de todos a través del diálogo que se va realizando.

ü  Unidad de lo cognoscitivo y lo afectivo en cada sesión de atmósferas creativas. Cuando se está trabajando el pensamiento creativo y reflexivo se parte siempre de que la actividad lúdica que se esté realizando va a movilizar los recursos afectivos e intelectuales de la persona que esté ejercitando en ese momento la misma. Además, es importante crear un clima donde se dé un  relación y un equilibrio entre lo afectivo e intelectual, para lograr un espacio dinámico y motivante para el pensar y crear.
 
Educar en la creatividad debe orientarse al desarrollo personal y la práctica educativa de todos los implicados en el proceso de enseñanza-aprendizaje, dentro de un contexto histórico social dirigido a la integración educativa, partiendo del criterio de que la creatividad nos permite tener una actitud flexible y transformadora que propone romper las murallas o barreras para edificar la nueva escuela del futuro, cuyos principales apellidos sean: integrada, solidaria, respetuosa, reflexiva, divergente, desarrolladora, abierta y consistente con las necesidades de todos los alumnos.

Todo lo anteriormente expresado conlleva una educación en la creatividad que propicie un sistema de actividades y comunicación donde el pensamiento reflexivo y el creativo se desarrollen a la par de una actitud coherente.

 Cada alumno que egrese de una escuela formado con esta visión deseará que en los lugares donde llegue se manifieste el pensar, crear, sentir, comunicar y compartir por respeto a sí mismo y a sus semejantes.

 

 

La Creatividad en la Educación


Educar en la Creatividad



Educar en la creatividad es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, flexibilidad, visión futura, iniciativa, confianza, amantes de los riesgos y listas para afrontar los obstáculos y problemas que se les van presentado en su vida escolar y cotidiana, además de ofrecerles herramientas para la innovación.

La creatividad puede ser desarrollada a través del proceso educativo, favoreciendo potencialidades y consiguiendo una mejor utilización de los recursos individuales y grupales dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje.

Siguiendo con estas ideas no podríamos hablar de una educación creativa sin mencionar la importancia de una atmósfera creativa que propicie el pensar reflexivo y creativo en el salón de clase.

La concepción acerca de una educación creativa parte del planteamiento de que la creatividad está ligada a todos los ámbitos de la actividad humana y es el producto de un devenir histórico social determinado.

Siguiendo con esta manera de pensar tendríamos un concepto de creatividad, que bien puede ser el siguiente:

Creatividad es el potencial humano integrado por componentes cognoscitivos, afectivos, intelectuales y volitivos, que a través de una atmósfera creativa se pone de manifiesto, para generar productos novedosos y de gran valor social y comunicarlos transcendiendo en determinados momentos el contexto histórico social en el que se vive.

Este concepto, integracionista, plantea una interrelación dialéctica de las dimensiones básicas con que frecuentemente se ha definido la creatividad.

Por otro lado, este educar en la creatividad implica el amor por el cambio. Es necesario propiciar a través de una atmósfera de libertad psicológica y profundo humanismo que se manifieste la creatividad de los alumnos, al menos en el sentido de ser capaces de enfrentarse con lo nuevo y darle respuesta. Además, enseñarles a no temer el cambio, sino más bien a poder sentirse a gusto y disfrutar con éste.

 Podemos afirmar, sin miedo a equivocarnos, que una educación creativa es una educación desarrolladora y autorrealizadora, en la cual no solamente resulta valioso el aprendizaje de nuevas habilidades y estrategias de trabajo, sino también el  desaprendizaje de una serie de actitudes que en determinados momentos nos llenan de candados psicológicos para ser creativos o para permitir que otros lo sean. 

miércoles, 6 de abril de 2016

El Rol del Docente Innovador

  • Ofrecer a sus alumnos las herramientas, habilidades y oportunidades para que desarrollen su capacidad innovadora
  • Es construir un sistema que permanentemente inspire y motive a todos los miembros de la Comunidad Educativa a generar ideas nuevas y a crear valor a partir de ellas
  • El orientador es  flexible, enseña aprender de forma  crítica, activa y colaboradora  
  • Permite  apropiación de Uso de la información tecnológica de forma crítica.
  • Estimula  la  participación  estudiantes para aprender  por si solos.

 El innovador busca nuevos métodos para trabajar, que no se limitan a su trabajo sino que invaden su vida personal. Suele acumular gran cantidad de aparatos porque adquiere las últimas novedades. Para él es necesario buscar nuevas soluciones, no tiene reparo en utilizar lo último de lo último, a veces corre el riesgo de que no funcionen, pero nunca tiene la sensación de haber perdido el tiempo porque lo considera una inversión. Intenta convencer a sus colegas de lo útiles que son las nuevas herramientas, el trabajo que le ahorrarán y los beneficios que le acarreará, claro que normalmente no valora las capacidades que él mismo atesora y que su colega tendría que adquirir para que esa evolución no le supusiese un trabajo extra.    

martes, 5 de abril de 2016


Características de un Docente Innovador


  • Respeta la diversidad, lo diferente, lo innovador.
  • No teme a los cambios, sino que se adapta a ellos.
  • Es capaz de reírse de sí mismo.
  • Siente interés por las nuevas tecnologías, y se inicia en su manejo de forma básica.
  • Es sensible a lo que sucede a su alrededor.
  • Posee una imagen positiva de sí mismo.
  • Busca la calidad en lo que hace.
  • Valora de forma positiva, la capacidad personal y social de los estudiantes.
  • Se enfrenta a los nuevos retos con autodeterminación y seguridad.
  • Percibe los objetivos, contenidos, metodología y evaluación, como algo flexible y modificable.
  • Desarrolla un espíritu de colaboración y trabajo en equipo.
  • Intercambia conocimientos y experiencias innovadoras con los compañeros/as de su misma unidad educativa y/o con los de otras unidades.
  • Favorece una cultura de centro basada en la innovación.
  • Posee una aptitud para reconocer y aprender de los errores. 

 

¿Cómo actúa un profesor innovador y creativo? 


 Dado que la creatividad y la innovación no sólo es una capacidad sino también una habilidad y actitud ante las personas y los hechos, el profesor creativo posee unas características en las tres dimensiones presentes en educación: ser, saber y hacer. Dicho con otras palabras, actitudes flexibles, dominio de los contenidos y competencia didáctica. He aquí unas pinceladas de su actuación docente.

a) El profesor innovador y creativo posee una disposición flexible hacia las personas, las decisiones y los acontecimientos; no sólo tolera los cambios sino que está abierto a ellos más que otras personas; está receptivo a ideas y sugerencias de los otros, ya sean superiores, compañeros o inferiores; valora el hecho diferencial; se adapta fácilmente a lo nuevo sin ofrecer excesivas resistencias; se implica en proyectos de innovación.

b) Por lo que respecta a su capacidad o conocimiento, la percepción rica en matices de cuanto le rodea. No se queda con la idea general sino que relaciona fácilmente un hecho con otro y unas ideas con otras. En esta misma línea cabe destacar su facilidad para integrar y evocar experiencias. Conoce y aplica diversas técnicas orientadas a la ideación y la creatividad de sus alumnos, no contentándose con que estos repitan lo que han oído o estudiado.

c) Entre las habilidades podemos referirnos a actuaciones como: inducir a los sujetos para que se sensibilicen a los problemas; promover el aprendizaje por descubrimiento; crear un clima de seguridad y fácil comunicación entre las personas; incitar al sobre aprendizaje y autodisciplina; diferir el juicio crítico cuando se están exponiendo ideas; estimular los procesos divergentes; formular e incitar a las preguntas divergentes; aplicar técnicas creativas. Estas actitudes son claves para generar climas de autoaprendizaje y de implicación espontánea y colaborativa.

lunes, 4 de abril de 2016


¿Qué  es Innovar?

Cambiar las cosas introduciendo novedades

¿Qué  es Innovación Educativa?

Conjunto de ideas, procesos y estrategias, más o menos sistematizados, mediante los cuales se trata de introducir y provocar cambios en las prácticas educativas vigentes.

La mejora puede ser reducir el esfuerzo; reducir costo; aumentar la rapidez en obtener resultados; aumentar la calidad, satisfacer nuevas demandas, etc..

¿Cómo son las Escuelas Innovadoras?

 Incluir novedades en el entorno escolar no solo quiere decir que se potencie el uso de la tecnología más puntera.
 Los denominadores comunes de las escuelas  innovadoras.pueden ser :

-Los niños son autónomos y disfrutan de tanta libertad como responsabilidad en el proceso del aprendizaje. Deciden qué quieren aprender, guiados por sus profesores de forma individual o colectiva.

- No se les dirige de forma homogénea, sino que se atiende a las necesidades de cada uno de los más pequeños, para proponerle actividades y aprendizajes adaptados a sus ritmos, evaluándoles preferentemente de forma particular.
-  Además, trabajan el concepto de comunidad, a través de dinámicas de colaboración que ponen de relevancia la importancia de las distintas aportaciones y la adopción de distintos roles dentro del aula.
- Entienden la libertad como el origen de la creatividad.


Una forma de incorporar novedades que produzcan cambios progresivos consiste en incorporar nuevas tecnologías que han demostrado éxito en otros campos; en este sentido utilizar tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en distintos productos y servicios produce cambios que consideramos innovación educativa.